El maestro Bernardo Pérez de Chinchón y la cuestión coránica
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Resumen
Bernardo Pérez de Chinchón fue uno de los traductores de Erasmo de Rotterdam en tierras españolas durante el siglo XVI. En 1535 publicó su traslado de la Praeparatio ad mortem y, en 1533, La Lengua de Erasmo nuevamente romançada por muy elegante estilo, de la que hubo otras dos ediciones cercanas, en 1544 y en 1550. También dio a la luz la Exposición al Pater Noster y los Silenos de Alcibíades, que se incorporaron al Índice de Valdés de 1559, además de algún otro texto erasmiano. Con el tiempo, evolucionó en su espiritualidad y compuso un Espejo de la vida humana, con eco a fines de siglo e incluso en el XVII, siendo definida esta obra por Marcel Bataillon como «libro nada erasmista». Pronto también contribuyó a la tratadística antialcoránica, dentro de su interés por la presencia islamista en el Levante peninsular, y redactó un Libro llamado Antialcorano, impreso en Valencia por Juan Jofre en 1532. Tres años después, en 1535, aparecieron sus Diálogos christianos contra la secta mahometica..., asimismo en Valencia, en la imprenta de Francisco Díaz Romano.