Vicente Bécares Botas, Librerías salmantinas del siglo XVI. Segovia: Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua-Caja Segovia, 2007
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Resumen
Desde la aproximación de Luisa Cuesta a la imprenta salmantina (1960), afortunadamente, los estudios sobre historia del libro en la Salamanca renacentista se han ido sucediendo y de manera notable en los últimos años. La aparición de la tipobibliografía de Ruiz Fidalgo (Madrid, 1994), con sus tres volúmenes y 1510 entradas, puso de manifiesto el relieve siempre evidente de la actividad impresora y libraria en la ciudad del Tormes. Las ricas fuentes archivísticas, especialmente las de la Universidad –con sus libros de claustros, los de visitas de cátedra y de otra naturaleza– y las del Archivo Histórico Provincial, con sus protocolos notariales sobre todo, han permitido estudios de base documental que ilustran con detalle la vida libraria salmantina, como los de Marta de la Mano, Mercaderes e impresores de libros en la Salamanca del siglo XVI (1998) o los del propio Bécares, que lleva tiempo dedicando sus afanes a estudios como el que hoy comentamos. Baste recordar La Compañía de Libreros de Salamanca (1530-1534) en 2003, o su Guía documental del mundo del libro salmantino del siglo XVI (2006), que tiene su antecedente en el ya raro Avance para una guía del mundo del libro salmantino del siglo XVI (Zamora, 2002) en tirada de tan solo cien ejemplares en edición privada, amén de diversos textos para congresos o revistas científicas. Bécares también suele acudir, como en esta ocasión, a otras fuentes documentales, las del Archivo Diocesano de Salamanca y las de la Real Chancillería de Valladolid.